Procrastinar, el primer enemigo de la productividad - Frank Liz

Procrastinar, dejar para después lo que deberías estar haciendo ahora, proveniente del latín procrastinare, donde pro significa adelante, y crastinus se refiere al futuro, procrastinar es exactamente la tendencia a no comenzar las tareas en el momento que corresponde post datando su realización a un futuro no especificado.

Cuando procrastinamos varias cosas pueden pasar:

– No comenzamos la tarea y no hacemos absolutamente nada en su lugar;

– No hacemos la tarea, pero hacemos otra que de momento pareciera más importante retrasando así la tarea principal, o

– Comenzamos la tarea, pero permitimos que muchos distractores interfieran retrasando su culminación.

Procrastinar es algo muy común, todos procrastinamos en algún momento; procrastinamos por miedo, por estrés, por ansiedad, por cansancio, por razones que nos hacen ver las tareas a realizar desde una percepción equivocada, alejándonos cada vez más de comenzar.

Puede que esto nos suceda con una tarea específica, o eventualmente porque estamos indispuestos de alguna forma, sin embargo, el verdadero problema se presenta cuando lo hacemos con mucha frecuencia o de forma crónica afectando nuestra productividad. Si eres un emprendedor que desea alcanzar el éxito es necesario que puedas avanzar cumpliendo metas por lo que procrastinar no será una opción, por eso hoy te diré como hacerlo sin que te sientas abrumado:

Pasos sencillos para incrementar tu productividad.

Herramientas para incrementar tu productividad

La mejor herramienta contra procrastinar es la planificación, ayúdate con un cronograma, una agenda y algunas listas, pero ten cuidado, es común de quien procrastina dedicar mucho tiempo “planificando” y poco ejecutando realmente lo que planifica, es una forma de autoengaño, ya que planificar genera la sensación de progresar aun cuando no se está haciendo nada.   

Técnica Seinfield: Esta sencilla técnica, sí, se llama así por el comediante Jerry Seinfield, es ideal para crear hábitos, consiste en tomar un calendario y marcar con una equis grande cada día que logramos hacer algo que nos hemos propuesto, por ejemplo, hacer 1 hora de ejercicio diario; ver como aumenta la secuencia de X es un gran incentivo como para no romper el ciclo, creando así un hábito.

Técnica Pomodoro: esta antigua técnica aún guarda vigencia, esta consiste en trabajar en intervalos de 25 minutos por 5 de descanso, y al término del cuarto ciclo descansar 15 minutos. Sin embargo, esta técnica cuenta con algunos detractores, que consideran que los intervalos de tiempo son muy cortos, por lo que se sugiere probarla hasta adaptar los intervalos que mejor le funcionen.

Aplicaciones: Si hay una forma en que se puede sacar provecho al teléfono inteligente esta es para dejar de procrastinar. Y la mejor opción la ofrecen las apps para administrar las tareas y el tiempo. Muchas de ellas se manejan también desde el ordenador sincronizando los cambios que se hacen en ambos dispositivos. Este tipo de apps ofrecen entre sus opciones listas, calendarios, planificación de proyectos, divididos en tareas e incluso permiten delegar tareas. Entre las más reconocidas se encuentran Trellowunderlist, o todoist. Particularmente Meister Task es la que mejor resultados me ha ofrecido.

Espero este artículo te haya sido de ayuda. Coméntanos ¿Qué estrategias usas para evitar procrastinar y aumentar tu productividad?

Photo by rawpixel on Unsplash

Suscríbete a nuestra Masterclass Gratuita